Platos de ducha acrílicos

Fabricados en su totalidad con lámina acrílica sanitaria tienen numerosas ventajas respecto a otros platos de ducha realizados con distintos materiales. En primer lugar, en caso de desperfectos ocasionales por arañazos, siempre podremos repararlo y dejarlo como nuevo.

La gran resistencia a los golpes, hace que los platos de ducha acrílicos sean ideales para baños con mucho uso, y donde los más pequeños podrán manejar botes, dosificadores y todo tipo de recipientes para gel y champú, sin miedo a que su caída accidental pueda dañar la superficie.

Por otro lado, su cálido tacto consigue que la frialdad de la desnudez sea mucho más liviana, y los primeros momentos en el baño dejen de ser desagradables.

Además, la poca altura con la que se fabrican, unido a la superficie antideslizante que poseen, elimina en gran parte el riesgo de accidentes en el baño: tropiezos por diferencia de alturas, caídas al entrar o salir de la bañera, resbalones inesperados por falta de antideslizantes, etc.

Por último, la variedad de medidas de los platos de ducha acrílicos, unida a sus múltiples formas y la ligereza del material, lo hacen adaptarse a casi cualquier espacio del que dispongamos.

De esta manera, cuando pensemos en platos de ducha rectangulares con un diseño innovador y que nos ofrezcan un grado de confort más que aceptable, la instalación de platos de ducha acrílicos será la mejor opción.