Las tazas de baño se han considerado como un elemento plenamente utilitario, dejando a un lado su elemento artístico. Sin embargo, en 1917 fue el vanguardista Marcel Duchamp quien cambió la concepción de esto, incorporando en una exposición un sanitario firmado por él mismo.
Desde ese momento, los urinarios pasaron de ser algo cotidiano para convertirse también, en muchas ocasiones, en objetos de arte. Hoy os vamos a dejar algunos ejemplos de las tazas de baño más raras del mundo.
Este terrorífico sanitario se encuentra en un museo de Oslo, el reconocido museo noruego Mini Bottle Museum.
Este bonito y decorado urinario fue creado en Austria en 1895 y se exhibió en la Bienal de Venecia.
Los japoneses no se quedan atrás y demuestran que también han incluido esta nueva tendencia con su urinario del Universal City Walk de Osaka (Japón).
Estos raros ataúdes se encuentran en un restaurante de Bogotá, La Juguetería.En nuestros próximo artículos os incluiremos más ejemplos como los de hoy. ¿Os han gustado? ¿Qué os parece mezclar lo utilitario con lo artístico?