Continuando con nuestro post de ayer, también suele preocupar cómo sujetar al bebé en el baño, especialmente para los padres primerizos. Lo normal y más cómodo es sostenerlo con el brazo derecho sujetando la cabeza con la parte interna del codo y pudiendo usar la mano para limpiarle la espalda y el culito.
Con un algodoncito o una esponja para bebés ir limpiándole con cuidado la cara, detrás de las orejas, las manitas y así hasta haberle enjabonado y aclarado entero, incluido el pelo. Ser cariñoso y cuidadoso es fundamental ya que el momento del baño del bebé sirve además para reforzar los vínculos afectivos entre padres e hijos.
Se recomienda bañar al bebé todos los días a la misma hora, generalmente antes de darle de cenar o acostarle, para crear una rutina de este momento de relax y descanso para el niño. A los recién nacidos les encanta el agua así que no dudes en aprovechar al máximo este momento tan especial, desde el primero al último.